domingo, 26 de septiembre de 2010

¿Seré adicta a salir a la calle?

Una vez que lo pruebas ……no puedes dejarlo

¿Seré adicta a salir a la calle?

Después de mi artículo sobre mi primera salida, he vuelto a hacerlo un par de veces más, y han sido experiencias mucho mas enriquecedoras que me hacen saber que tengo mas confianza en mi imagen.

Lo primero que hice fue comprar unas botas planas, sin tacón, pero muy a la moda, compré un blusón azul para usarlo con mallas y que se me viera un escote discreto pero que hiciera dudar sobre mi género.

Claudia como siempre se lució con el maquillaje, fue un lunes y había poco movimiento, sin embargo se estaba maquillando ella también, y para mi sorpresa, muy agradable sorpresa, fuimos juntas ala calle, a un restaurante tipo árabe donde nos sentamos a la mesa para pedir el menú para llevar, fueron como seis cuadras, que me parecieron muy cortas, el tiempo volaba, nos entregaron el menú y salimos…. primer contacto y todo normal, de ahí caminamos otras calles y llegamos al café Emir que abrieron en la contra esquina de Blush, nos sentamos y pedí un té helado, (gracias Claudia, el próximo café va por mi cuenta), lo pedimos para llevar y al llegar a la puerta de Blush, no entré, decidí ir sola a toda la Zona Rosa, fui al centro comercial, entré a tiendas y en una hasta revisé algunos disfraces para Halloween, ya sé cuál quiero, pero hay que bajar al menos otros cinco kilos y 5 cm. más.

En el trayecto qué pasó, de hecho regresé a Blush a cepillarme el cabello, era peluca nueva y me la acomodé bien, el viento la había desarreglado, y acomodarme el blusón, el escote se notó mas, me toco hasta un tipo que solo dijo ¡ hay güey” mirando el escote, pero lo increíble es que caminé por unas cuatro horas en los alrededores, ví ropa que quiero comprar pero que no se si me queda y me prometí regresar por ella.
http://www.flickr.com/photos/nicole_kowalski/5027864885/

De ahí esta segunda parte de mi relato, la segunda salida fue para ganar confianza, la tercera fue muy completa y me dejó varias lecciones.

Consistió de dos salidas el mismo día, con vestuario diferente, el primer conjunto fue con un vestido súper corto pero con mallones opacos, y las boyas bajas de nuevo, pero eran para poder salir a comprar ropa que deseaba probarme.
http://www.flickr.com/photos/nicole_kowalski/5028323630/

Salí a la calle, el escote es mucho mas pronunciado que el del otro conjunto,( http://www.flickr.com/photos/nicole_kowalski/5025787615/) y enfilé hacia la calle de Londres, y llegué a una tienda de ropa que está casi con Génova, había visto unos jeggings en estampado de Chita blanco y negro y me animé a entrar, me dijo “hola linda”, y revisé las tallas, encontré unos talla 13, pero no sabía si me quedaban, “¿te los quieres probar?, y pasé al probador, dos lecciones aprendí en ese momento, la primera, no uses uñas postizas si te vas a probar ropa y menos si es pegadita y apretada, salen volando, y la segunda, que bueno que llevaba efectivo, debes llevar efectivo y una identificación contigo, no sabes si algo te pasa al menos te identificarían, y el efectivo para no exponer tu nombre.

Me probé los jeggings, perfectos, pegados, y hacen que el trasero y las piernas se vean fabulosas, me cambié de nuevo y pagué en efectivo, me sentía soñada, era una compra en femenino, y supe que no llevaba suficiente dinero, afortunadamente, por que necesitaba una blusa que hiciera juego, un cinturón, unos aretes, pulsera, etc.

Después de divagar por las calles vi que iba a soltarse la lluvia, tercera lección, lleven un paraguas siempre en su bolsa, yo lo llevaba, había un chipi chipi, de esos moja pend…., y así no arruiné mi maquillaje.

Al llegar a Blush Claudia estaba maquillando a una nueva socia, Laura, “mira ella es Nicole, está contigo en la sala privada”, mientras le ponía la peluca y le decía que se veía justo como la vez anterior, era su segunda visita a Blush en la semana y la segunda vez en su vida en ir a Blush, me agradó bastante, envidia de la buena, por que es súper delgada y le queda todo, domina muy bien el uso de tacones altos y es de plática agradable.

Me cambié las botas por unas de tacón alto, las extraño, me encantan no lo puedo evitar, (vean el catálogo de botas de Blush), y comenzamos a platicar, mientras me tomaba fotos, y supo que venía de estar en la calle, le comenté que un tipo en un Corsa rojo me estaba siguiendo, echándose en reversa sobre Liverpool hasta que me di vuelta en Amberes en sentido contrario, y que cuando se fue me regresé de volada a Blush justo antes de que se soltara la lluvia, le enseñé mi compra y me animó a probarme los jeggings.

Me animé y me fui a cambiar, los jeggings y un blusón negro, (http://www.flickr.com/photos/nicole_kowalski/5023278858/) y en eso me dijo que si se bajaba la lluvia igual se animaba a salir conmigo, en ese momento pensé que mi aventura del día ya había concluido, pero no, todo se conjugó, dejó de llover, y le dije que si, se fue a cambiar los zapatos, lo mismo hice yo, pero ella legó con unas sandalias de tacón como de 10 cm, y traía una minifalda a la rodilla y un blusa de manga larga de cuello de tortuga, pero yo estaba algo destapada con el blusón. Claudia nos prestó unas chamarras y comenzó la nueva a aventura, Laura solo me decía que fuéramos por donde hubiera menos gente, pero en la Zona Rosa, y con el chipi chipi y lo charcos traté de llevarla por mi primer recorrido, Amberes, Hamburgo, Génova, Liverpool, y me decía “que aventura, gracias, un sueño”, la verdad es que la entendía en cada paso y cada expresión, eso sentí yo la primera vez, pero lo hice sola.

Lo distinto es que, al cansarse ella de los tacones, justo como me pasó a mí, le dije que si quería sentarse a tomar algo, “ahí hay mucha gente” era el Starbuks, tampoco el Konditori, y le mencioné el café Emir, “órale ahí si”, pero de camino sobre Liverpool, me dijo “una patrulla!”, ya ni le dije pero es justo la Secretaría de Seguridad Pública, y no hay una, hay un friego, yo solo le decía que estuviera tranquila y que nadie se mete con nadie, a mitad de la calle encontramos la entrada del Sanborns del hotel Geneva, que cruza de Londres a Liverpool, y le dije que si se animaba ahí, había poca gente, y que entramos, nos llevaron a la zona de mesas y escogimos una, nos llevaron las cartas “que van a querer las señoritas” yo pedí un Nesté negro helado y Laura hizo lo mismo.

Fue una platica larga, sería como de una hora, pasaba gente, se llenó una mesa de cómo diez personas a nuestro lado, pero no nos importó, era muy amena, y me decía “te debo una” a cada rato, y en todo esto, me di cuenta que yo le debía otra, fue la primera vez que había podido platicar con alguien en mis mismas condiciones, usando maquillaje, ropa y peluca, con una imagen femenina real, pero sabiendo lo que somos, con familia, que nuestro travestismo es una válvula de escape a la vida tan estresante y que es un único momento de egoísmo puro ya que todos los días hacemos todo por nuestros hijos y esposa, para darles una buena vida siendo el centro de nuestras vidas, y sin embargo a ser ella Laura y yo Nicole, eso se deja un lado por unas horas al mes.

Nos llevaron la cuenta y no me dejó pagar, se animó ella a ir a la caja y pagó, nos pusimos las chamarras de nuevo y salimos de ahí, no sin notar que tuve que contenerme a abrirle la puerta, de hombre eso hago con las mujeres, pero yo era una, y ella igual, ella me abrió la puerta y creo que pensó lo mismo.

Llegamos a Blush ya tarde como a las 10:00 de la noche, y a cambiarnos, desmaquillarmos y regresar a nuestras vidas, pero se forjó una amistad, y creo que el próximo viernes la animaré a salir y que se pruebe algo de ropa, o solo tomar un café.

A todas mis amigas de Blush, esta es una invitación abierta, la ubicación es única y la plática espero entretenida, y muy sincera.

Gracias Laura, Claudia y Javier

Besos.

miércoles, 22 de septiembre de 2010

"... un coche que tiene el volante del lado derecho..."

Voy a relatarles un suceso -trivial- que viví hoy. Me encaminaba a cumplir con una tarea de mi trabajo en una parte cualquiera de la Ciudad de México, y renunciando momentáneamente a la "prosapia" de la investidura en la que me he autoarropado, -ja, ja-, me percaté de que había un puesto de tacos de guisados en la vía pública, pero tenía la peculiaridad de que estaba rodeado de bastante gente, quizá unas 25 o 30 almas eran los comensales de este pintoresco y urbanamente cotidiano lugar.

El olor esa exquisito, ya que su exhibición de guisados contenía picadillo, tortas de carne, chiles rellenos, "bisté" -sic- -así lo dijo el taquero-, milanesa, longaniza, salchicha, alambre y en fin... una variedad como para aplacar el apetito del más hambriento, de manera generosa.

Pues bien, me encontraba ya degustando tan excelsos manjares rodeado de apreciables miembros de las bases revoclucionarias -empleados de a salario reducido, con todo respeto lo digo y sin ánimo de denostar su situación-, cuando uno de los taqueros comentaba con la empleada que cobraba:  

"fíjate que ayer vi un coche que tiene el volante del lado derecho..."

Lo dijo a manera de comentario solemne. Pero eso no fue lo extraño, sino las respuestas que le dio la empleada, que a leguas se notaba que no tenía preparación académica suficiente; si acaso primaria o concediéndole el beneficio de la duda: secundaria trunca.

"ese coche era europeo" -lo único en lo que acertó-.

"en Europa todos los coches tiene el volante así" -imagino que la empleada había pasado largas temporadas en Europa y visitado todos los países de aquel continente-.

"en Europa todas las calles están al revés" -imagínense... sólo le faltaba rebuznar a las señora-

y varias tonterías mas por el estilo.

Lo más increíble, fue la aseveración del taquero, correspondiente a los comentarios de la señora:

"esque -sic- era un coche para zurdos"

¿Quéeeeeeeeeeeeeeeee? -Pensé-.

Miré el rostro del taquero y era de seriedad, de haber "descubierto" una verdad irrefutable, de deducir con certeza un silogismo basado en premisas determinantes. A lo que la empleada también dudó y le concedió cierto fundamento.

Ahí terminó para ellos una disertación trascendente en el momento y que les "despejó" dudas respecto a los automóviles con el volante del lado derecho. Es una trivialidad, para ti y para mi, estimado lector. Y pregunto: ¿Qué tiene que ver esto con el travestismo?

Pues verán: Existen en la red o peor aún, en el mundo físico, personas que mal informan respecto a asuntos tan delicados como aconsejar a otros como lo es toda cuestión inherente al travestismo. He escuchado diversidad de estupideces. Como muestra, algunas:

-Si no pruebas con un hombre, nunca vas a saber si eres gay,
-Tienes que inyectarte tal substancia,
-Tienes que salir a la calle, tienes que salir del clóset,
-Tienes que decírselo a tu familia,
-La gente nos tiene que aceptar como somos,

Y mil y una pendejadas por el estilo.

Señores: "meterse" a dar consejos a los demás, induciéndolos a conductas contrarias a su voluntad o atreverse a dar recomendaciones y más en la situación de "líderes" de grupos: "ES UN CRIMEN", en el mejor de loa casos, es una estupidez.

El hecho es comparable al  "episodio" del taquero y la empleada.

Emito una preocupada y firme recomendación a los líderes de opinión de agrupaciones físicas y virtuales del  travestismo: No a todos los travestis nos vienen los consejos que con frecuencia emiten, así como por el simple hecho de existir vehículos con volante del lado derecho, no implica que hayan sido construidos para zurdos o que las calles estén al revés.

Si no son especialistas en alguna disciplina relativa a la psique humana, absténganse de aconsejar a los demás, no contribuyan a engrosar las filas de las personas frustradas y aterradas de su situación de tener un gusto diferente a la mayoría, e inducidas al error por gente ignorante y estúpida que sin ton ni son, va por la vida creyendo poseer la verdad absoluta del tema.

Recuerden que alguien puede tener 5, 10, 15 o mas años practicando alguna actividad, pero no por eso tiene 15 de experiencia.

¿Cómo? Así es... No es lo mismo 15 años de experiencia que un año repetido 15 veces.

Ayúdanos a no percibir todas las calles "al revés"... No hagas caso de "consejos" sin fundamento.

Lorena
22 de septiembre de 2010.

domingo, 19 de septiembre de 2010

"MEDIO KILO DE BARBACOA"

Hoy fui por barbacoa para comer.

Es a veces este acto de alimentarse, considerado por bastante público casi como un "ritual" de domingo. Pues bien, no siendo ajeno a la identidad nacional mexicana, el que esto escribe comparte el gusto de manera superlativa.

Hoy pedí medio kilo para llevar y comer en casa, disfrutando la presencia de mi familia. El caso es que al cortar la ración de tan preciada carne, el "Paisa" -gentilicio genérico para todo taquero sea de barbacoa, pastor o suadero- me dijo: "se pasa por 200 gramos, ¿te dejo los 700?"  A lo que respondí con un tajante: ¡NO! te pedí medio... A lo cual el mentado "Paisa" puso su jeta y cortó parte de la pieza de carne hasta que pesó 500 gramos en la báscula.

Pero... ¡Procedió después de pesarla,  a quitarle como 200 gramos de huesos! A lo que reclamé. ¡Oye Paisa. no me amueles, pésame la carne, no me voy a comer los huesos, no soy perro! Y respondió el desgraciado: Esque -sic- así se sirve aquí...  De inmediato puso un poco mas de carne ya sin pesarla en mi pedido, percatándose de que lo que hacía era una "tranza"  bien hecha. Para los lectores de otros países, tranza es un modismo de México que se refiere al acto de efectuar pequeñas o reiterados fraudes en cualquier situación cotidiana.

¿A qué el relato aparentemente tan fuera de lugar? ¿Qué tiene que ver esto con el travestismo? Pues que han llegado bastantes personas a Blush quejándose de que van a uno que otro lugar a que los maquillen o transformen y esto es lo que sucede:

- sea moreno o güero: base blanca de maquillaje = jeta de fantasma
- sombras y labial contrastantes = listo para el "talón"
- cosméticos caducos -sólo duran como un año- o de ínfima calidad
- microfaldas o mini vestidos asumiendo que nos gusta vestir como "rameras"
- ubicaciones altamente peligrosas

Trato pésimo o con cita -como si tuvieran 100 antes que tú-

En fin... Mientras existan "changarros" para pintarte y cambiarte sin ningún  respeto por la imagen femenina y menos por la calidad en los servicios, va a ser difícil que el estándar sea la excelencia por lo que pagas.

Estimado lector, fíjate muy bien dónde decides tomar tu servicio de transformación travesti, ya que puede ser la diferencia entre cumplir tu fantasía o vivir tu peor pesadilla. En resumen, compra donde te vendan "la barbacoa sin huesos y por la cantidad que pediste"...

Lorena

miércoles, 15 de septiembre de 2010

HOY CUMPLO 44

Así es... Y no lo escribo para recibir felicitaciones; sólo es el principio de una reflexión.  Me encamino hacia el medio siglo de vida. El saldo de esta aventura: Considero que comienza a ser estable y positiva. ¿Qué tiene que ver con el travestismo? Pues sólo algunos detalles:

- Mi esposa la conocí -indirectamente- por este medio.
- Mi hija mas pequeña fue concebida y ha crecido en el ambiente travesti.
- El travestismo ha sido mi principal fuente de manutención en los últimos años.
- Buenas relaciones han salido del travestismo y he ganado buenos amigos.

Claro que existen facetas malas en cuento a esto, pero esas prefiero descontarlas del balance. Si analizo concienzudamente el saldo, pues podría decir que esta vida -de travesti- me ha llevado a ser extremadamente infeliz y por otra parte,a ser extremadamente dichoso. Creo que así se vive el travestismo, en uno de los dos lados; este gusto no permite que te mantengas en medio del camino, ya que aceptas lo que vives o te enfrentas permanentemente a ti mismo.

En fin... hoy cumplo 44 y puedo decir con alegría que el balance comienza a ser positivo.

Lorena

miércoles, 8 de septiembre de 2010

¿Qué sería del travestismo sin internet?

Quizá todo seguiría igual, quizá no. Lo que me atrevo a plantear, y esto es algo que salta a la vista, es un comparativo de 1990 a nuestros días.

- En 1990 estaba en "pañales" el internet. En cuanto al travestismo, había grupos aislados de ayuda mutua; mas enfocados al apoyo humanitario entre sus miembros, que negocio. Ejemplo de ello, Crisálida y pocos mas. No llegaban sus miembros a una veintena y eso después de haber vencido barreras que entonces se antojaban infranqueables.

- Había publicaciones dedicadas a travestis y transexuales por igual; pero eran extranjeras, en su mayoría de los EUA o Reino Unido. Era un verdadero viacrucis poseer alguna.

- El grupo o los grupos no contaban con difusión de manera sencilla, por lo hermético del tema -travesti-tabú-.

Imaginen hoy día el travestismo de esa -reciente- época. Miles y miles de personas seguirían "en el clóset". Miles y miles continuarían sintiéndose bichos raros o con problemas mentales.

Afortunadamente, al día de hoy contamos con esta herramienta que es el medio por el que estás leyendo este texto. Lo escribo en la Ciudad de México y al instante puedes leerlo en cualquier parte del mundo. Este es el poder de la red, la ayuda generalizada a seres como nosotros, que día a día nos ayuda a no sentirnos perdidos en el "laberinto" de nuestros pensamientos, temores y angustias que puede generar el gusto por vestir diferente, por vestir de mujer.

Es por lo anterior, que te pido, estimado lector; que reflexiones acerca de los grupos, sitios web, blogs y demás elementos existentes actualmente, alusivos al tema travesti. Procura aportar algo útil a nuestra condición de minoría, -no tan pequeña créelo-. No incurras en participaciones en espacios de gente abusiva y hueca que sólo publica estupideces por sentirse popular. Aporta con tu pensamiento e ideas a espacios y foros que puedan servirte y servir a los demás.

Hagamos una "campaña de concientización" de la web útil, no la basura habitual que encuentras en la "red. Porque, dicho sea de paso: Creo que es mas importante saber las opiniones de gente afín a nuestro gusto, que observar cuántos amigos tiene un tonto que se siente travesti bonito. ¿Cuál de esos dos escenarios crees que contribuye a lo que buscas?

Hasta mañana.

Lorena



P.D. ¿Hasta cuándo dejarán de publicar basura?      Día 1



martes, 7 de septiembre de 2010

¿Son los únicos?

Hace poco una persona me reenvió un correo de un sujeto que invitaba a otro a un lugar para travestirse, diciéndole: "Tengo una casa de transformaciones"...  Me quedé pensando y analizando el escrito, no sin esbozar una sonrisa.

No denostaré la labor de la persona que cree que tiene una casa de transformaciones, pero mi razonamiento es: ¿Ya cualquiera renta una casa, compra ropa de paca, clava unas tablas y ya tiene una CASA DE TRANSFORMACIONES?

Lamentablemente así es. En el último par de años hemos visto cómo abren y cierran "changarros" que dicen ofrecer los servicios que proporciona BLUSH a precios más baratos.  Y como mencioné, es válido el espíritu emprendedor, pero en el terreno del travestismo es muy delicado el abrir un lugar de servicios. ¿por qué?

Porque tratamos con personas -como todo negocio- pero también directamente con su "psique", con lo que sabemos que nos atrae, atormenta, excita o inquieta en lo mas profundo de nuestro ser. Y es ahí donde Blush ofrece los servicios, el ambiente y las condiciones ideales para el desarrollo interior. Cualquiera puede abrir la puerta y estirar la mano pidiéndote dinero, pero nosotros vamos mucho mas allá que eso.

Es peligroso ir a meterse a lugares donde te ofrecen maquillaje profesional, cuando sólo "te pintan la cara" como callejera, o te dicen que dejes fluir tu yo interno, "arrojándote" a convivir con personas que no se travisten. Discúlpenme, pero esas sí son "puterías; y así van organizando fiestecillas de lencería, de esto y de aquello, que nada tiene que ver con el travestismo, sino con el libertinaje en el que puede incurrir un comercio sin profesionalismo ni ideas de vanguardia en pro de los demás. En Blush siempre estamos mas allá, y respondiendo a la pregunta que otra persona me hizo por correo electrónico: ¿Son los únicos?

Pues ¡Si! Somos los únicos que te vemos como un ser humano que puede venir con cierto recelo y después de conocernos, desarrollar su parte femenina. Somos los únicos en ofrecerte un ambiente de respeto, calidad y servicios profesionales. Así que la próxima vez que pienses en asistir a lo que en realidad es UNA CASA DE TRANSFORMACIONES, sólo hazte una pregunta muy personal y muy sincera:

¿Qué busco:  tranquilidad, seguridad y discreción o de plano me llama la atención el ligue y que me metan mano?   En pocas palabras: Clase o vulgaridad...

Nos vemos mañana...

Lorena

lunes, 6 de septiembre de 2010

¿Qué hay para hoy?

A veces me pregunto eso. ¿Qué hay para hoy? No lo sé... Quizá conozcamos personas interesantes, posiblemente sea un día perfecto, quizá no. Pero de lo que estoy seguro, es de que mi vida dentro del ámbito travesti, la viviré hoy con plenitud.

Y no tengo que travestirme en lunes, simplemente debo estar trabajando en Blush o "paseando" en el ciberespacio para saber más del travestismo en mi localidad y el mundo.

Y déjame decirte lector, que a pesar de que trabajo en un lugar travesti, no representa el 100 % de mi vida. Es aquí donde pretendo llegar: Habemos quienes consideramos el travestismo como parte de nuestra vida, no toda nuestra vida. Debes tener cuidado de personas que hacen de esta afición, el propósito de su existencia.  ¿Cómo saber quienes son? Es sencillo: Cuando leas o escuches de alguien -travesti por supuesto- frases como estas:

-La mas bonita -en singular o plural-,
-La mas hermosa,
-La mas popular,
-La que tiene mas amigos,
-La que domina tal o cual nicho,
- "Fulanita" Y sus amigas,

y una serie de sandeces por el estilo, ten cuidado, porque estás ante una persona que observa conductas nefastas hacia el travestismo. Este tipo de gente hace de la convivencia en la internet -porque en persona son generalmente "ostras reprimidas" un infierno y algo que no valga la pena conocer.

Así que: ¿Qué hay para hoy? Pues una prevención acerca de la conducta de gente que deberíamos contribuir a "enfriar" y desaparecer de la red.

Dicho lo anterior y considerando que he aportado una pequeña prevención a este transitar por la vida y obra del travestismo, me retiro por este día.

Esperemos leernos mañana en este espacio.

Lorena M.

domingo, 5 de septiembre de 2010

FIESTAS, FIESTAS, FIESTAS...

¡La Fiesta del Bicentenario!, Las Adelitas y varias trivialidades mas... A partir de Septiembre y hasta  fin de año,  la comunidad travesti -y en general la sociedad-, se encarga de organizar fiestas, reuniones y demás convocatorias alusivas a fechas por demás trilladas. ¿Su contribución al desarrollo humano como travestis? NULA

¿Qué ocasiona este gente que se dedica a organizar fiestas arropándose hipócritamente en la bandera de la pseudo popularidad y el pseudo activismo? 

Un grave daño a la percepción del travestismo por la sociedad. Así es... Les voy a comentar algunas características que observamos en estos grupos:

- Patéticas figuras masculinas enfundadas en ropa femenina no acorde a su edad ni estética corporal.

- Maquillaje ridículo en bastantes casos -base blanca de fondo de "fantasma", labios brillantes de labial en tono "chillón" y peluca generalmente "güera". Digo... Somos latinos y a la mayoría nos van los tonos castaños; no los rubios forzados.

- En casos frecuentes, ademanes exagerados que nada tienen que ver con la mujer.

-Bastantes se escudan en grupos pequeños, lo que les da seguridad para confrontar tanto a autoridades como a peatones y automovilistas en general.

¿Qué vamos a ganar como minoría organizando y participando en tantas fiestas? Nada. Sólo el descrédito reiterativo de actitudes estúpidas como esas. Está bien participar en reuniones y eventos, pero no estaría por demás quitarles la coraza de eventos en pro-del travestismo. Es tonto y ridículo pensar que dos o tres fiestecillas sin sentido ayuden a la psique del travesti a generarle seguridad y respeto. 

¿Creen que el respeto se gana exhibiéndose con pintados y vestimentas de rameras en las calles? Por supuesto que no.

En la medida de lo posible, no participes en este tipo de tonterías, organizados por personas que generalmente buscan protagonizar algo , debido a la falta de aceptación de su núcleo familiar y social.  No contribuyas a que nos sigan tildando de "freaks" o "pinches jotos o putos" -que nada tiene que ver con personas gays-. Tratemos de concientizarnos y romper la inercia de la "borregada" que generalmente termina en orgías o borracheras con peluca.

Diviértete con familia, con  amigos, como tú quieras, pero por favor: No contribuyas a denostar y propiciar el linchamiento a nuestra ya de por sí dañada imagen de travestis.

El travestismo es en esencia, la imitación de la imagen femenina por admiración y respeto a la mujer, no contribuyas a caricaturizarla y ridiculizarla.

Lorena 

viernes, 3 de septiembre de 2010

A veces basta con el recuerdo de un bien intencionado...


Ya son dos años.

Esto es un asunto personal, pero necesito compartirlo. Hace dos años murió mi madre, en una fecha como hoy.  Tengo ya 43 y puedo decir que no importa la edad ni el tiempo: Aún duele. Quizá Blush sigue en pie, aparte del valioso trabajo de Claudia,  en parte gracias a su apoyo.  Ella acudía a menudo y convivía con los socios y clientes travestis en Blush. Mi madre nació en 1940, miembro de una de esas generaciones en las que los hombres vestían habitualmente de traje y las mujeres no usaban pantalón. Pueden suponer el choque emocional que traería el hecho de introducirla al mundo travesti de los 2000es.

Pues bien; para mí su legado al travestismo, fue un apoyo incondicional, sin preguntas, sin sarcasmos ni críticas. Una aceptación y fascinación por conocer mas allá que travestis: ¡Personas! Sí, ella veía personas, no indumentarias ni poses. Eso sí: Nunca le dije que yo era travesti. Pero no hacía falta. Ella lo asumía y lo aceptaba por amor.

En fin... para qué especular. Le dedico mi recuerdo, mi permanente pensamiento y una frase que espero poder comunicársela algún día; pero no en este estado de espacio-tiempo: ¡Gracias mamá!